Diario FICMTY (I)

Galeria Regia: Cine Regiomontano Reciente.
Así rezaba en el calendario del Festival Internacional de Cine de Monterrey. Tal evento fue el pasado domingo 14 de agosto, en la Galería Regia, ubicado en el Barrio Antiguo del Centro de la Ciudad.
Asistí un poco tarde a la cita, debido a que tenía un compromiso pendiente, pero llegué. La Galería Regia es en realidad una vieja casona debidamente restaurada y acondicionada para albergar exposiciones de arte. Es uno de los lugares más reconocidos por el mundo del arte regiomontano.

Cuando entré a la sala de proyección (que había sido acondicionada como tal en una sala de exposiciones, con cuadros de pintura en las paredes), observé que era un lugar reducido como para albergar a casi 20 personas. Aunque en el momento en que me hice presente allí, solo había como 10 personas. Lo cual me indicaba que probablemente ese evento no tuvo mucha difusión publicitaria. Ni siquiera los encargados de ese evento no sabían qué había pasado con los catálogos oficiales del Festival, ya que aun no llegaban a todos los puntos de la ciudad donde se exhibirian las películas. Un punto menos a los organizadores del festival.

¿Y qué decir de los cortometrajes que se exhibian ahí? La mayoria de los cortos fueron filmados el año pasado y en el primer semestre del 2005. Algunos tan buenos, como Destinados (David Garza, 2005), La acera de enfrente (Ismael Nava, en coproducción con Catalunya, España, 2005), La Diosa Fortuna (Luis Villarreal, 2005). No tuve el gusto de ver el corto 4B, de mi colega Pepe Caudillo, que ha sido exhibida en el Festival de Cine de Holanda y en el de Nueva York. A ver si la podré ver la próxima vez que la pasen.
Por supuesto, como pasa siempre con todo festival, hubo cortometrajes regulares y otros bastante malos, que no vale la pena mencionar sus titulos. Yo me pregunto si los organizadores del FICMTY habrán realizado una mala selección de cortos, pero analizando friamente las cosas, en Monterrey no se produce muchos cortometrajes como quisieran los cineastas. Por eso, para darle más duración al programa, incluyeron esos cortometrajes tan malos, que lograron realmente su cometido para el que fueron creados: ahuyentar al público presente ahí. A tal grado que, al terminar la proyección, solo quedaban en la sala ¡seis personas! Eso sin contar con Leticia Vargas, representante del Gremio de Cineastas de Nuevo León, quien estuvo al cuidado de la proyección.

Al terminar la primera sesión de cortometrajes, anunciaron que dentro de 15 minutos proyectarían más cortometrajes. Pero de por sí la mayoria de esos cortos eran tan malos, que no me daban ganas de ver los restantes cortos ya que uno no sabe en qué momento apareceria un buen cortometraje en qué disfrutar visualmente.

Así que decidí salirme de ahí, a darme una vuelta por el Barrio Antiguo, admirando obras de arte de artistas que vendian en una calle. Y pensando en cuál sería el próximo evento del FICMTY para seguir con mi labor de cronista cinéfilo