sábado, abril 21, 2007

Sobre la situación del cine mexicano

Debido a un comentario de un lector que se quejaba de que son los mismos cineastas quienes reciben apoyos especiales del IMCINE en el post sobre el nuevo corto del cineasta Juan Manuel González, he decidido exponer aquí lo que yo realmente pienso acerca de ese tipo de apoyos especiales para producir cortometrajes y largometrajes en México.

La realidad es que el cine mexicano siempre ha dependido de unos cuantos y no de todos los cineastas. Así de simple. Por eso, Guillermo del Toro, Alfonso Cuarón y Alejandro Iñárritu mandaron a chingar a su madre a los productores de la industria mexicana porque no les apoyaban en sus primeros proyectos, y mejor se fueron al extranjero. Y allá hicieron buenas películas y ganaron muchos reconocimientos por su visión creativa.

La industria del cine mexicano, desde los años 70, SIEMPRE se ha caracterizado por ser una industria llena de COMPADRAZGOS entre cineastas y burócratas para producir, filmar y distribuir cortometrajes y largometrajes en México y en el extranjero. Esto es un HECHO, y se sabe desde hace mucho tiempo. Claro que esto afecta a la mayoría de los cineastas mexicanos, lo cual está mal. Pero esta situación no cambiará hasta que haya PROFUNDAS REFORMAS de orden legal dentro de la industria cinematográfica mexicana, desde la forma de invertir en cortos y películas hasta la distribución y los exhibidores, como para que pueda competir comercialmente con las de otros países. Pero hasta que no ocurra eso, siempre los cineastas mexicanos recibiremos limosnas y dádivas de instituciones gubernamentales para la producción cinematográfica.

Ahora bien, si a alguien no le gusta cómo las instituciones públicas dan apoyos a los mismos cineastas, entonces que NO participe. En mi caso, desde hace mucho que ya no le sigo el juego a las convocatorias del IMCINE y de instituciones públicas de México, por la sencilla razón de que son una pérdida de tiempo, debido a que el proceso burocrático es muy engorroso y acortan la vida útil de la producción de un cortometraje y/o película. Pero OJO: cierto que son los mismos cineastas, pero hay algunos que son muy buenos contando historias y, en mi opinión, está bien que reciban esta clase de apoyos, sobre todo en México. Sin embargo, los cineastas imprescindibles, es decir, cuyos cortos o largometrajes de gran calidad narrativa valen la pena disfrutarlas en la pantalla grande, por lo general se marchan al extranjero.

Sencillo como esto: los que quieran hacer cine, en vez de andar perdiendo el tiempo criticando a los demás por los apoyos y todo eso, HÁGANLO AHORA. Nada de quedarse con los brazos cruzados, rumiando rabia y/o envidia por doquier. Si alguien desea hacer verdaderamente cine, tiene dos opciones:

  1. Hacer cine por su propia cuenta, empezando primero con cortometrajes sencillos (pero que tengan historias bien escritas, eh) y mandarlos a festivales de cine. En los festivales de cine, siempre hay posibilidad de que ganen algún premio monetario en que invertir en el siguiente corto, así como en equipo de edición y de cine. No importa si el premio es pequeño, pero algo es algo. Pero esta opción no es fácil, ya que exige tener una ENORME paciencia a toda prueba y no perder la FE en lo que se hace, especialmente a la hora de convencer a los demás miembros del equipo a que sigan unidos cuando no hay resultados inmediatos a la vista. Busquen contactos de gente profesional (guionistas, editores, productores) que les pueda echar una mano para poder llevar a buen puerto sus proyectos.
  2. Irse al extranjero, y estudiar en alguna escuela de cine como la New York Film Academy. Sólo así de esa manera podrá producir sus proyectos cinematográficos sin todos los problemas que aquejan al cine mexicano, ya que allá podrá tener todo el apoyo necesario para que pueda ser filmado.

Cada quien puede elegir una de las dos opciones que más le convenga para realizar cine. Si alguien tiene mucho dinero para irse a estudiar cine en el extranjero, ¿a qué espera para irse allá? Si alguien no puede irse al extranjero, puede obtener dinero de un segundo trabajo para poder invertirlo en un cortometraje. Conozco a cineastas que tienen segundos trabajos, cuyas ganancias los invierten principalmente en sus cortos, como Pepe Caudillo, y han logrado cierto reconocimiento a nivel nacional e internacional.

En mi caso, no tengo contemplado producir algún proyecto de cortometraje mío en este año, ya que estoy enfocado en la producción de un videoblog de cine que deberá estar listo para mediados de este año. Ya lo anunciaré oficialmente en su debido momento.

Por otro lado, quiero aclarar que mi blog apoya a todos los cineastas de México, ya sea desconocidos o famosos, publicando sus cortometrajes para que los lectores los conozcan. Varios cineastas que no son muy conocidos en México y en otros países se han puesto en contacto conmigo para que yo les publique sus cortos en este blog, lo cuál hago con mucho gusto sin pedir nada a cambio.

Por ejemplo, recientemente he publicado en mi blog el trailer del cortometraje Bye, Bye Navina del cineasta Carlos Morales Olvera, quien busca apoyo en estos días para poder terminarlo —especialmente en la post-producción de sonido—, y así poder estrenarlo en algún lado. ¿Alguien se anima a apoyarlo?

Espero que este post les haya quedado lo suficientemente claro a quienes se andan quejando todo el tiempo por lo de los apoyos gubernamentales a los mismos cineasas, como para que se se animen a producir sus propios cortometrajes y/o largometrajes.

3 comentarios:

Charlymorse dijo...

Pues estoy de acuerdo en que hay que hacer cine aquí y ahora, sobre todo si no no se está de acuerdo con la manera en que se reparten los apopyos oficiales.

Lo que sí creo cierto es que en el caso de Juan Manuel, es alguien que ha hecho mucho por el cine regiomontano mientras otros sólo se han quedado cruzados de brazos tirando mierda. Su interés en el medio es genuino, y viene desde suficiente tiempo atrás.

Años antes de Voladero, mientras Juan Manuel estudiaba cine en Arizona (creo), se preocupaba por mandar por correo postal un boletín informativo a la UdeM, donde nos actualizaba a quienes ahí estudiábamos aún sobre qué estaba pasando en el mundo del cine independiente. Era una época previa al internet, donde era prácticamente imposible enterarse de cosas como esa a menos que estuvieras en el lugar donde ocurrían. Y él estaba ahí y lo compartía con nosotros.

Otra muestra: ¿quién más en Monterrey se preocupó, hace 10 años, por la falta de opciones para una formación ACADÉMICA del cineasta, y decidió hacer algo al respecto? Muchos se quejaban de eso, claro. Pero Juan Manuel fue el único que hizo algo para resolverlo, y dio su tiempo, su esfuerzo y su dinero a cambio de la oportunidad de poder estar al frente de un taller de cine que hoy ya tiene reconocimiento oficial por parte de una institución educativa como lo es la UANL.

Luego vino el festival Voladero, que eventualmente se convirtió en el FIC.

Gracias a estos más de 10 años de esfuerzo desinteresado (en el sentido económico) Juan Manuel está hoy haciendo lo que muchos (entre ellos varios envidiosos) anhelan: vive del cine. Quizá no de hacerlo, pero sí de difundirlo, apoyarlo, enseñarlo, y ESO es lo que necesita el cine en nuestro país: propositivismo.

Hay que criticar, sí. Pero yo creo que es más importante HACER. Hacer cine, como se pueda, tanto como se pueda. Eso es lo que se necesita para que haya industria.

No sé si la propuesta de Juan Manuel de "Al Fin" merecía el apoyo o no, eso es asunto de los jueces. Pero ya está dada, se está aprovechando, y yo sí creo que esos recursos van a usar bien, porque están en buenas manos.

C.M.

PD - Cineasta regio, gracias por el apoyo en tu blog. Ya conseguí quien escriba la música de mi corto. Irónicamente, es un músico que vive en E.U... Hablando de la falta de apoyos, ¿verdad?

Kelzor dijo...

Si es que en todas partes pasa lo mismo. A un lado u otro del charco. La palabra clave es "perseverancia"

Fender Stratokaster dijo...

Hace como un mes, Aristegui tuvo como invitados en su programa al trío conocido como “Los Tres Amigos” Del Toro, Cuarón e Iñárritu. (fue una entrevista muy interesante) Entre los puntos que trataron me llamó la atención el referente a los apoyos.

Mencionaban que el momento que ha vivido el cine mexicano en el último año es como una gran fiesta, y ha sido tan buena, que se preguntaron: por qué no organizar otra para el próximo año, e invitar a más gente nueva. Y que para ello se requieren de leyes y reformas (bien comentabas tu Cineasta Regio) que obliguen a los distribuidores y televisoras apoyar con recursos (OJO) primeras y segundas películas, y así “renovar las voces”

Personalmente desconozco el trabajo de este director. Lo conozco más por la labor que ha desarrollado en pro del cine en la ciudad, más que por su obra. No creo que tener 10 años promoviendo el cine en la ciudad, sea una razón que merezca que le suelten 750, 000 pesos. En eso creo que el propio Juan Manuel González estará de acuerdo. Aquí la bronca está en saber el criterio que usan los que sueltan el billete al momento de destinar los apoyos.

No se puede culpar a nadie de sospechar de amiguismo, compadrazgo, padrinazgo; si quienes reciben los apoyos están de alguna u otra forma vinculados más allá de la pasión por hacer cine. Pero en fin, yo he escuchado muchas cosas sobre todo esto de los apoyos... ¡Hasta de mafias “gays”! Je, je, je... ¡Dios nos libre!